Pastelillos de frutas del bosque.
Pastelillos de frutas del bosque.
Agradablemente frescos y ligeros, como la brisa perfumada que sopla en un pinar.
Preparación: 25 min. + 12 horas en el frigorífico.
Ingredientes para 6 personas:
- 600 g de requesón. o de queso fresco.
- 250 g de frutas del bosque variadas (fresas, frambuesas, arándanos, grosellas, moras) + la necesaria para decorar los platos.
- 2 Cucharadas de azúcar de caña.
- 20 cl de nata para montar.
- 2 Cucharadas de miel (del tipo más fluido).
- Poner en un colador grande el requesón o el queso fresco y escurrirlo perfectamente para eliminar todos los residuos de suero.
- Limpiar las frutas del bosque, lavarlas y secarlas con cuidado dándoles ligeros golpes con una hoja de papel de cocina.
- Volcar las frutas del bosque en un cuenco y espolvorearlas con el azúcar de caña. Mezclar y reservar, dejándoles macerar en el azúcar unos minutos.
- Mientras tanto, montar la nata con la batidora eléctrica hasta que quede bien firme.
- Amalgamar en un cuenco grande el requesón (o el queso fresco), la miel y las frutas del bosque. Incorporar la nata montada.
- Forrar con gasas 6 moldes individuales de fondo perforado.
- Distribuir la crema y plegar la gasa, cubriendo los pastelillos.
- Apoya los moldes en una rejilla, a su vez colocada sobre un gran plato hondo. A continuación meterlos en el frigorífico durante 12 horas, de forma que los pastelillos puedan adquirir firmeza y, si es necesario, perder más suero de leche aún presente en la crema.
- En el momento de servir, retirar los pastelillos de los moldes y quitarles la gasa, colocarlos en platos de postre individuales y decorar al gusto con más frutas del bosque.
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