Receta de tarta helada de melocotón en almíbar

Fuente: https://okdiario.com/recetas/receta-tarta-helada-melocoton-almibar-5884388

Esta tarta helada de melocotón en almíbar es un postre fácil, rápido y delicioso. Tener melocotones en almíbar en la despensa es un pequeño tesoro. Esta fruta fácil de conservar que ya viene pelada y lista para la acción en perfecta para darle un poco más de vida a los postres. La usamos de base para combinar con un helado o simplemente la acompañamos de nata. Si quieres emplear ese melocotón en almíbar que tienes en una receta de restaurante, toma nota de cómo preparar una tarta helada que hará historia.

Ingredientes:
1 kg melocotón en almíbar
1 paquete de galletas maría
1 cucharada de cacao en polvo
400 ml de nata
300 ml de leche condensada
20 gr de gelatina en polvo
2 claras de huevo
Una pizca de sal

Cómo preparar una tarta helada de melocotón en almíbar

Vamos a hacer una base con las galletas maría fácil y deliciosa. Trituramos las galletas y las reservamos.

Aromatizamos la base con un poco de cacao en polvo el chocolate le vendrá de maravilla a este postre.

Aprovecharemos el almíbar de los melocotones, le vamos añadiendo este elemento a la mezcla de galletas y cacao.

Cuando tenga la consistencia adecuada, una especie de pasta, preparamos un molde desmoldable.

Forramos la parte de abajo con papel de horno para que no se pegue. Ponemos esta mezcla de galletas que será la encargada de darle estabilidad al postre.

Trituramos los melocotones hasta tener lista una especie de puré que será el que le aporte sabor y color a esta tarta.

Mezclamos la leche condensada con la nata. La calentamos para que se convierta en el relleno dulce ideal.

Batiremos las claras de huevo, una pizca de sal nos ayudará a que estén más firmes sin tanto esfuerzo.

Incorporamos el puré de melocotones a la nata y leche condensada. Mezclamos hasta tener todos los ingredientes bien integrados.

En ese momento ponemos la gelatina. Dejamos que se disuelva para darle la consistencia adecuada a nuestra tarta.

Por último, le agregamos las claras de huevo a punto de nieve. Le aportará una textura más esponjosa.

Cubrimos la base que tenemos lista con este relleno. Llevaremos directamente a la nevera o al congelador.

Antes de servir la sacamos del congelador, mejor hacerlo unos minutos antes para que quede más suave.

Decoramos con un poco de nata o helado de vainilla para tener listo un plato sorprendente y fácil de preparar.